Historia del mundo contada para escépticos (Divulgación) - Tapa blanda

La sobre información, muchas veces, termina siendo un problema; así como es difícil pensar el mundo sin poseer la data necesaria, lo mismo ocurre cuando tenemos datos por demás; por eso cada tanto me viene bien leer algún libro o ver alguna película que me ordene un poco, sobre todo a lo que fechas y acontecimientos importantes se refiere.

Historia del mundo contada para escépticos, de Juan Eslava Galán, me ha servido mucho a ese propósito, pero además me ha permitido disfrutar de varias horas de lectura amena, divertida, irónica y reveladora. Pero lo más importante: éste libro me abrió varias puertas, debido a su propia naturaleza. El hecho de que se trate de una especie de resumen cronológico del mundo desde sus inicios hasta la actualidad, hace que, por obvias razones, el autor tenga que dedicarle pocas páginas a cada acontecimiento histórico, lo que, sin embargo, lleva a que las cotas de curiosidad se eleven y uno quiera comprarse, al terminar de leerlo, decenas de libros específicos sobre cada evento tratado.

A lo largo de 125 mini capítulos, recorreremos la historia del mundo desde la creación del universo, la evolución del hombre y la aparición de los grandes imperios, pasando por el ascenso del poder de la religión (y sus tretas), el “descubrimiento” del Nuevo Mundo o las Guerras Mundiales y terminando en temas de claro contenido actual, como la globalización, el despertar del Islam o el ocaso de occidente.

Desde una visión eurocentrista, lo que como sudamericano me lleva a no coincidir en todo con el autor, pero al mismo tiempo con una apertura mental que se agradece, Juan Eslava Galán (que ya había escrito libros de similares características como Una historia de la guerra civil que no va a gustar a nadie o Historia de España contada para escépticos) nos ofrece un libro de lectura amena que nos ayuda a ordenar mentalmente la línea del tiempo del mundo y al mismo tiempo nos alerta sobre el futuro, ya que como la historia lo demuestra, solemos repetir aquello errores históricos solo por no recordarlos y aprender de ellos. No por nada Alemania, una vez más, se ha convertido en el dueño del mundo...

En tiempos de vacaciones (de verano por Europa, de invierno por Sudamérica) siempre es bueno tener un libro que al mismo tiempo actúe como incentivo para incorporar nuevas lecturas: Historia del mundo contada para escépticos es el que yo les recomiendo, curiosos del mundo.

Roberto Maydana