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Rústica. Condición: Muy buen estado. 191 pgs. Mafia / Poder político / Corrupción / Narcotráfico / Extradición / Sustitución de sembradíos / Tratado multilateral / Narcotráfico y política internacional / Lavado de narcodólares / El lavado, el poder / El cinismo / Debate sobre despenalización del consumo. Algunas Instituciones que necesitamos para combatir la narcocriminalidad están en contra de nuestra tradición penal. La narcocriminalidad no es un delito tradicional, tiene sólo 20 años. Hoy, el 90% de nuestra inseguridad pública es ocasionada por delitos relacionados con la droga. Estamos en el peor de los mundos posibles. No tomamos la decisión política de combatirla en serio. No la legalizamos. O sea, el equilibrio justo que beneficia al narcocriminal. Estamos combatiendo al narcotráfico con un sistema disléxico. Se supone que no tenemos, como estados, una complicidad cínica, pero no prospera el proyecto para formular una declaración formal de guerra al narcotráfico y, por otro lado, aumenta la opinión de que la única solución es la legalización, mientras tanto, no hagamos nada. También resulta asombrosa la sensibilidad de algunos jueces para respetar los derechos humanos de los narcotraficantes. Las víctimas son una cosa abstracta, los traficantes tienen tantos derechos que no se los puede combatir con eficiencia. Esto produce en el policía el círculo vicioso de la desmoralización y la corrupción. «Si el juez está tan preocupado por los derechos humanos de los delincuentes, para qué arriesgar mi vida luchando contra ellos si después, con un buen y costoso abogado, y un código de procedimientos confuso, termina procesando al agente honesto y deja libre al delincuente». Los bancos importantes, ¿realmente quieren una legislación que les permita impedir el lavado de dinero proveniente de la droga? ¿Qué hacemos con los paises que han institucionalizado el cinismo? Suiza, ¿lava más blanco? ¿Vamos a continuar conviviendo con ellos en la Comunidad de Naciones, sabiendo que ellos son el reaseguro de todos los criminales que matan a nuestros hijos? Este es un delito intrínsecamente internacional. Las leyes para combatirlo no pueden constituir un galimatías incomprensible y contradictorio, para que abogados inescrupulosos ganen fortunas defendiendo criminales, debido a las imperfecciones de nuestras leyes. Este es el desafío: Compatibilizar nuestras leyes y darle a nuestros jueces los instrumentos idóneos para ser eficaces. Caso contrario, demos con honradez el debate sobre la despenalización. El Parlamento Europeo y el Parlamento Latinoamericano han hecho gran parte de su trabajo. Argentina acaba de agregar 13 artículos a la Ley de Represión y Lucha contra el Narcotráfico, producto de esa compatibilización. La Unión Interparlamentaria no hizo nada, para ellos esto no es un problema que deba considerarse. La Organización de Naciones Unidas ha citado a una Conferencia especial en el año 1994, en la ciudad de Roma. Estamos marcando un camino. Si hubiera sido fácil, ya lo hubieran hecho antes. Porque es difícil es que trabajamos. -Eduardo Varela-Cid.