"No juzgues a un libro por su cubierta", dice un famosos refrán popular. Y si bien es cierto que la mayoría de las personas escogemos nuestros libros tomando en consideración su contenido, en ocasiones es lícito enamorarse de los mismos por su tipo de encuadernación.
Dejando a un lado la literatura, hay portadas que son arte en sí mismas y, por lo tanto, dignas de admirar. Éstas son capaces de convertir una obra en un codiciado artículo de colección para aquellos bibliófilos que aman los libros como objeto, más allá de su contenido.
Todas las encuadernaciones que presentamos aquí han sido realizadas con materiales fuera de lo común, desde piel de serpiente hasta nácar, pasando por piel con incrustaciones de diamantes o piedras preciosas o por terciopelo.
¡Una selección que no dejará indiferente a nadie!
Y tú, ¿conoces otros libros con encuadernaciones insólitas?