Pueden existir numerosas razones por la que un coleccionista decida vender su colección (o parte de ella). Para ciertos coleccionistas de libros no se trata tanto de poseer libros antiguos y raros sino de la emoción que les supone la búsqueda de esas obras por lo que, una vez que han completado la colección que tenían prevista, deciden venderla y lanzarse a la siguiente aventura literaria. En otras ocasiones puede ser, simplemente, que un coleccionista quiera deshacerse de alguna de sus copias tras haber encontrado a la venta otra más atractiva.
Mientras que, normalmente, la forma más rentable o provechosa de vender un libro o una colección de libros es encontrar otro coleccionista al que puedas vender tus libros directamente, sabemos que esto puede resultar difícil (no hay más que preguntar a cualquier librero que seguro le dirá que en las estanterías de su librería hay algún libro que lleva esperando ser vendido por décadas). Si no encuentra el comprador ideal con el que negociar directamente aquí tiene otras opciones que puede considerar:
Subastas
Las casas de subastas son fáciles de encontrar pero, de nuevo, no podemos olvidarnos de realizar una búsqueda exhaustiva hasta encontrar aquella que se ajuste a nuestras necesidades; ya que, tanto las comisiones como los niveles de servicio que prestan, varían considerablemente de una a otra. Las grandes casas de subastas o aquellas especializadas podrán incluso catalogar una colección para su venta.
Vender a través de internet
Si desea vender su colección a través de internet debe saber que tiene una amplia variedad de opciones disponibles. Cualquiera puede vender a través de eBay o de algún sitio web dedicado a la venta de objetos de segunda mano. También existen, por supuesto, los mercados online dedicados a la venta de libros antiguos, como IberLibro. Amazon también tiene un mercado establecido para la venta de productos de vendedores ajenos a la empresa. Recuerde que cada una de estas páginas web es diferente y, aunque sus características puedan variar, requerirán altos estándares de profesionalidad.
Comerciar con un librero
No olvide nunca que un librero tiene que mantener su propio negocio y que, por lo tanto, el precio que le ofrecerá por su libro o libros nunca será más del 40% o 50% de su valor estimado. Esto es porque, por supuesto, necesitan revender dicha obra con un cierto beneficio y además pagar los impuestos de su propio negocio. En este sentido, el comercio de libros antiguos no es diferente al de, por ejemplo, los coches de segunda mano. Si posee una colección especializada puede que desee negociar con un librero especializado en libros similares.
Un librero sólo irá a su casa a echar un vistazo a la colección que tiene a la venta si piensa que los libros que la componen presentan algún valor de reventa por lo que necesitará darle detalles de las joyas que componen su biblioteca para hacerle interesarse por la misma.
Donar una colección
Puede también que desee considerar donar su colección a una biblioteca especializada en libros antiguos de alguna fundación académica. Entre las ventajas que presenta la donación de libros podemos remarcar las siguientes: 1) sabrá que sus libros se van a encontrar en buenas manos, 2) la colección permanecerá unida, y 3) la gente podrá seguir contemplando su colección mucho después de que usted no esté aquí para mostrarla.