Los mejores libros jamás escritos.«No dejaré de seguir el camino que he seguido siempre. No tengo más que uno y no puedo escoger.»Con La Casa lúgubre, Dickens afianzó su reputación de novelista serio a la par que de maestro del efecto cómico, presentando un relato que tiene tanto de historia de misterio como de crítica a una sociedad caracterizada por su estricta indiferencia. En un experimento creativo inusitado, el autor reparte el hilo de la narración entre Esther Summerson, quien conforma un peculiar perfil psicológico, y el narrador anónimo cuya perspectiva complementa y en ocasiones cuestiona la de la protagonista.La tarea de edición de Juan Camargo se complementa con la extraordinaria traducción de Alberto Reyes en un esfuerzo por presentar al lector la más fiel versión de la novela. Asimismo, la introducción del genial escritor G. K. Chesterton rinde merecido homenaje a uno de los mayores logros de Dickens.G.K. Cherterton dijo...
«Quizá sea su mejor novela. Cuando Dickens la escribió, había madurado.»
Charles Dickens (1812-1870) nació en Portsmouth y era el primogénito varón de un funcionario de la Armada Real. A los doce años, el encarcelamiento de su padre por deudas lo obligó a ponerse a trabajar en una fábrica de betún. Su educación fue irregular: aprendió por su cuenta taquigrafía, trabajó como ayudante en el bufete de un abogado y finalmente fue corresponsal parlamentario del Morning Chronicle. Sus artículos, luego recogidos en Escenas de la vida de Londres por «Boz» (1836-1837), tuvieron gran éxito y, con la aparición en 1837 de Los papeles póstumos del Club Pickwick, Dickens se convirtió en un auténtico fenómeno editorial. Novelas como Oliver Twist (1837-1839), Nicholas Nickleby (1838-1839) o Barnaby Rudge (1841) alcanzaron enorme popularidad, así como algunas crónicas de viajes, como Estampas de Italia (1846). Con Dombey e hijo (1846-1848) inició su época de madurez, de la que son buenos ejemplos David Copperfield (1849-1850), su primera novela en primera persona y su favorita, en la que desarrolló algunos episodios autobiográficos; La Casa lúgubre (1852-1853); La pequeña Dorrit (1855-1857), Historia de dos ciudades (1859), Grandes esperanzas (1860-1861) y Nuestro amigo común (1864-1865). Murió en Gad's Hill, su casa de campo en Higham, en el condado de Kent.