Críticas:
«Tous à poils lors des troisièmes mi-temps de la Seconde Guerre mondiale! Dans ce beau livre de photographies... on découvre, mi-ahuri, mi-faciné, les «selfies» virils de valeureux soldats dans le plus simple appareil. Point de jeux de mains (jeux de vilains), mais une camaraderie joyeuse et fraternelle, qui dit l indéfectible pulsion de vie entre les combats. La guerre comme on ne l a jamais vue.» --Augustin Trapenard in ELLE Man, Paris, France
Reseña del editor:
Jueguecitos de guerra Camaradería masculina... en cueros Para las tropas de la Segunda Guerra Mundial, cada jornada era estremecedora y, además, bien podía ser la última de sus vidas. Para apuntalar los ánimos y proteger la moral de sus hombres frente a los horrores de la guerra, los altos mandos los animaban a forjar estrechas relaciones de amistad en las que encontrar apoyo emocional. La compañía constante de aquellos compañeros de trinchera, de cuya vida dependía la de uno mismo, ayudó a establecer amistades muy íntimas. Durante el tiempo en el que no combatían hombro con hombro procuraban entretenerse juntos y descargar tensiones entregándose a payasadas y juegos, en ocasiones completamente desnudos. Resulta imposible conocer con exactitud el alcance de estos «juegos nudistas» entre las tropas de la Segunda Guerra Mundial (las cámaras eran escasas y resultaba difícil revelar los carretes), pero algunos soldados documentaron este proceso sin precedentes en modestas y anónimas fotografías que, por lo general, permanecieron ocultas hasta después de su muerte. El fotógrafo de Los Ángeles Michael Stokes ha dedicado muchos años a rastrear estas fotografías y compilar un archivo de más de 500 imágenes. Su colección incluye soldados y marinos australianos, ingleses, franceses, italianos, polacos, rusos y estadounidenses, revolcándose en las arenas del Pacífico Sur, tiritando en la nieve de Europa del Este, posando en solitario en los barracones y disfrutando en grupo casi en cualquier lugar. Estas imágenes nos muestran a hombres que apenas han alcanzado la edad adulta, hombres en su mayor esplendor físico que responden a las realidades del combate viviendo cada día como si fuera el último: una faceta de la guerra que nunca antes se ha hecho pública. El texto que acompaña las imágenes es obra de Scotty Bowers, antiguo marine de 89 años y autor de Full Service, memorias de sus aventuras sexuales en Hollywood en las que revela también el modo en el que la guerra modificó su percepción de la homosexualidad y la heterosexualidad, del mismo modo que estas fotografías pueden cambiar el modo en que pensamos sobre la Segunda Guerra Mundial y la camaradería en tiempos de guerra.
"Sobre este título" puede pertenecer a otra edición de este libro.