El Príncipe Lestat (Crónicas Vampíricas 11) (La Trama) - Tapa dura

Bueno, bueno, bueno... ¡Qué alegría! ¿Cuánto hace? ¿Quince? ¿Veinte años? Dejémoslo en veinte. Veinte años, desde que cayó en mis manos el primer libro de Anne Rice, y primera parte de sus Crónicas Vampíricas, Entrevista con el vampiro. Un libro fantástico, genial y con vampiros de verdad, de los de antes de que se pusieran de moda (auque nunca dejen de estarlo) y degeneraran en telenovelas para adolescentes. Un libro que dio lugar a una película (ya nunca he podido dejar de ligar a Lestat con Cruise, a Louis con Pitt ni a Armand con Banderas) también memorable y fantásticamente rodada por Neil Jordan (quien hace un par de años volvió a los chupasangres con Byzantium, no tan redonda como Entrevista..., pero digna también dentro del género).

Si bueno fue el primer libro, los dos siguientes, Lestat, el vampiro y La reina de los condenados lo fueron también e incluso lo superaron.  De la secuela de la película mejor no hablar...

Para mí esa es la trilogía dorada de Anne Rice. Hubo más libros (El ladrón de cuerpos y Memnoch el diablo no estaban del todo mal pero ya no eran tan perfectamente redondos como los tres anteriores, tiraban más a la fantasía y se alejaban de lo “mundano”).

La Rice se dedicó también a otros géneros: disfruté muchísimo –y los recomiendo encarecidamente–  con La momia, El sirviente de los huesos, Taltos, y Las brujas de Mayfair.

Y pasó el tiempo. Ya no recuerdo si leí Vittorio, El vampiro Armand, Pandora,... pero creo que no. Empezarlos sí los empecé pero creo que no pude acabarlos y me desencanté un poco... Tal vez no eran interesantes o tal vez no estaba en ese momento en el que lector y lectura se compenetran, quién sabe, pero así fue.

Después Anne Rice empezó con los hombres lobos y más tarde se hizo religiosa/creyente/cristiana/veteasaber. No se metió a monja, simplemente en 2005 anunció que sólo escribiría sobre Jesús, y parió la trilogía del Mesías. Tan convencida estaba sobre el hecho de no volver a escribir sobre vampiros que llegó a declarar:

Nunca volveré a hacerlo, ni siquiera aunque me dijeran "te vas a arruinar, ¡tienes que escribir otro libro de vampiros!"; diré que no. No tengo elección, ¡sería una tonta para toda la eternidad por haberle dado la espalda a mi Señor!

Afortunadamente, no ha cumplido su palabra y he podido reencontrarme, tanto tiempo después, con algunos de mis vampiros favoritos, y, concretamente, con el más carismático de todos: Lestat.

Y a ver si ya me meto un poco con el libro que nos ocupa.

Puede que os pique el gusanillo si nunca habéis leido las Crónicas Vampíricas, o que como es mi caso, haya pasado mucho tiempo desde que las leisteis y tal vez os estéis preguntando “¿hace falta haber leído toooodas las Crónicas Vampíricas para poder leer El Príncipe Lestat?”. Bueno. Personalmente opino que si se han leído las tres primeras (Entrevista..., Lestat... y La reina de los condenados) es suficiente. Y, particularmente, creo que es muy importante La reina... ya que este libro tiene mucho que ver con el origen de todo, con la génesis del vampiro en sí mismo, según la mitología creada por Rice.

La trama de este libro una vez leído te hace plantearte si el llegar hasta este punto estaba planeado por la Rice desde el principio de las crónicas (cosa que dudo) o si ha sido una idea feliz (felicísima, por cierto) con la que poner punto final (y eso que tampoco es seguro que este sea el último libro, pero es que aparte de ser un gran broche para toda la saga no se me ocurre que más podría pasarle a Lestat... aunque en cualquier momento podría sacarse otros vampiros de la manga...)

(Y al hilo de esto, siempre me ha llamado la atención los nombres que Anne Rice da a sus vampiros: Lestat, Pandora, Marius, Magnus, Everard, Akasha, Enkil, Maharet, Mekare,... curiosos y bonitos).

Pero al grano, que estoy divagando... En El Príncipe Lestat los vampiros se han extendido como la pólvora y una voz misteriosa está ordenando y haciendo que los vampiros más viejos destruyan (quemándolos con su don de fuego) a los más jóvenes.

¿Qué es esa voz? ¿Podrán pararla o acabará poco a poco con todos los vampiros?

Ese es el punto de partida de la novela. Parece simple, pero aunque el misterio puede descubrirlo el lector a mitad de libro, no por ello debo dejar de aplaudir en la idea de Rice (ya sea, como he dicho, pensada o llegada en forma de bombilla sobre su cabeza).

En este tomo además, tendrán tanta importancia vampiros, como fantasmas y espíritus y descubriremos muchas de las cosas que tanto tiempo llevamos queriendo saber como, por ejemplo, el origen de la sociedad secreta Talamasca, aquella cuyo lema es “vigilamos y siempre estamos ahí”.

En definitiva, El príncipe Lestat es un libro imprescindible para todos los seguidores de Anne Rice y de Lestat; un broche que remata muy bien la historia de la “vampiridad”, que entretiene y reparte protagonismo entre un gran número de personajes y subtramas concluyentes en el apoteósico final y que se lee con avidez.

Es una obra muy coral, y a pesar de eso, o precisamente por ello, permite una lectura fluida y rápida, que nunca aburre porque los personajes están muy bien construidos con muy poca descripción, lo que redunda en la rapidez de las historias porque, es la historia lo que realmente importa.

Los capítulos se leen con mucha facilidad cambiando de un personaje a otro y volviendo cada cierto tiempo a Lestat. La prosa ágil y el interés creciente del argumento te mantienen en un querer y a la vez no querer avanzar, pues eso supone el final de esta entretenidísima lectura.

En fin, un regreso esperado durante mucho tiempo que no decepciona en absoluto y que me ha reabierto el apetito por libros anteriores de Anne Rice.

PD: me queda una duda. ¿A Lestat lo recordaba yo más “malvado” o es cosa mía?

Transcurrido más de un cuarto de siglo desde la publicación de Entrevista con el vampiro y Lestat el vampiro, Anne Rice regresaba a sus «Crónicas Vampíricas» con El Príncipe Lestat para darle una vuelta de tuerca a su cosmología vampírica y devolvernos a su seductor mundo de espíritus y fuerzas oscuras.

«Beberé de tu sangre y tú beberás la mía. Nos conoceremos y amaremos el uno al otro, y seremos hermanos por siempre jamás, sangre de la misma sangre. »

El mundo de las criaturas de la noche está sumido en una crisis: los vampiros han proliferado sin control y ahora han empezado a producirse pavorosos incendios en todo el mundo. Algunos vampiros ancianos, despertados de su sueño bajo tierra, obedecen las órdenes de una misteriosa Voz que los incita a quemar indiscriminadamente a los jóvenes no muertos, rebeldes que rondan por ciudades como París, Bombay, Hong Kong, Kyoto y San Francisco.

En El Príncipe Lestat nos reencontramos con personajes ya conocidos como Louis de Pointe du Lac, el eternamente joven Armand, Mekare y Maharet, Pandora y Flavius, David Talbot y Marius, así como con otras nuevas y seductoras criaturas, reunidas todas ellas con el objetivo común de averiguar quién o qué es la Voz y descubrir qué pretende y por qué.

La única esperanza de todos ellos reside en el peligroso, rebelde y deslumbrante Príncipe Lestat.

Reseñas:
«Maravillosa. El Príncipe Lestat salva a los no muertos de la banalidad y el exceso de familiaridad.»
Daniel D'Addario, Time

«Después de los dramas saturados de hormonas adolescentes, es agradable contar de nuevo con un auténtico adulto en el mundo de los vampiros.»
Cotton Codinha, Elle

« El Príncipe Lestat infunde nueva vida a las "Crónicas Vampíricas" y crea el escenario de una nueva era.»
Elise de los Santos, Chicago RedEye

«Divertida, seductora y atrapante.»
January Magazine

«Escalofriante.»
US Magazine

«Rice nos ofrece un relato de tremenda ambición y lo hace con absoluta entrega.»
Matthew Jackson, BookPage

«Irresistiblemente seductora.»
John Russell, Next Magazine

«Anne ha vuelto con un bombazo.»
Sun